Geopolítica Simplificada

32. Edición Especial II: Los Ganadores y Perdedores del 2025

Esta columna trata de explicar y predecir lo que pasa en el mundo de una manera sencilla y simplificada. Por eso no podemos dejar de ofrecer nuestras predicciones sobre los futuros perdedores y ganadores para el 2025. Al igual que para el 2024 este ranking es arbitrario, basado principalmente en dos criterios: su impacto global y su capacidad de sorprendernos.

Los Perdedores del 2025

Europa ocupará el tercer lugar. En 2024, los principales países europeos culminaron con gobiernos de coalición débiles y altamente polarizados. Sus economías no logran recuperarse plenamente del impacto del COVID-19, y la guerra en Ucrania expuso la vulnerabilidad de un modelo económico dependiente de la energía barata rusa. Además, Europa enfrenta serias dificultades para adaptarse a los nuevos paradigmas económicos basados en la innovación y la inteligencia artificial. A esto se suma la constante presión migratoria proveniente de África y Oriente Medio, un desafío que Europa sigue sin poder abordar de manera unificada. Europa sigue sin encontrar su identidad política y cultural como un continente unido.

Las políticas de Diversidad, Equidad e Inclusión (DEI) ocuparán el segundo lugar. Por años las políticas de DEI surgieron y se expandieron desde las universidades americanas al resto de las instituciones del país. Originariamente surgieron como un esfuerzo noble para garantizar igualdad de oportunidades y respeto a personas de diferentes orígenes, géneros, religiones y orientaciones.  Sin embargo, estas políticas han evolucionado hasta convertirse en herramientas restrictivas, socavando principios democráticos fundamentales como la libre expresión. La mayor expresión de estos movimientos liberales se vio en las manifestaciones en los campus universitarios. Esto produjo un contra movimiento cultural anti-woke, que contribuyó a la elección de Trump y al avance político de la derecha en todo el mundo.

Ucrania se llevará el primer lugar entre los perdedores del 2025. Tal como predijimos a principios de este año, Putin y Trump negociarán un armisticio que pondrá fin a la guerra. El presidente Zelenski tendrá poca influencia en el acuerdo, y no logrará las garantías de seguridad suficientes por parte de la OTAN. Además, los compromisos occidentales para la reconstrucción del país probablemente quedarán en grandes promesas más que en acciones concretas. Ucrania saldrá del conflicto perdiendo alrededor del 20% de su superficie, con millones de refugiados exiliados y una generación de jóvenes diezmada por la guerra.

Los Ganadores del 2025

Israel ocupará el tercer lugar entre los ganadores. En el ámbito militar, consolidará su hegemonía regional tras las victorias sobre Hamás, Hezbolá y el debilitamiento de Siria, sin importar quién gobierne allí. En 2025, continuará avanzando en las tratativas de normalización con Arabia Saudita, buscando establecer un nuevo eje de poder en la región con el respaldo de Estados Unidos. Irán, por su parte, quedará debilitado, enfrentando mayores riesgos de ataques militares si no alcanza algún tipo de acuerdo con Washington sobre su programa nuclear. Por encima de todo, la sociedad israelí demostrará, una vez más, su resiliencia. Israel continuará mostrando al mundo que es una democracia liberal y una economía innovadora, y que, a pesar de estar siempre preparada para la guerra, buscará la paz con otros países árabes, tal como ocurrió en el pasado con Jordania y Egipto.

Milei ocupará el segundo lugar. Durante 2025, la inflación continuará su descenso sostenido, mientras que la economía argentina crecerá más del 5% anual. Trump, con un abrazo simbólico durante la inauguración de su segunda presidencia, lo catapultará a la escena política global. Milei se convertirá en el nuevo referente de la derecha en el mundo occidental. Intelectuales y líderes de derecha lo presentarán como un ejemplo pragmático del éxito económico de sus políticas. Su discurso libertario será adaptado al máximo para justificar políticas para reducir el tamaño del Estado en Estados Unidos y desarmar parte del Estado de bienestar en Europa.

Los usuarios de la Inteligencia Artificial (IA) encabezarán este ranking. Más allá de su impacto en disciplinas científicas como la biología, la medicina o la física, la IA comenzará a redefinir la vida cotidiana de todas las personas con acceso a un dispositivo móvil. Se convertirá, poco a poco, en un compañero inteligente—más articulado que el promedio humano—con acceso a prácticamente toda la información acumulada por la humanidad. Esta tecnología revolucionará la forma en que tomamos decisiones, aumentando nuestra productividad, facilitando tareas complejas y, en muchos casos, ofreciendo un soporte emocional en momentos difíciles. La inteligencia artificial no solo será una herramienta, sino una presencia constante que redefinirá nuestras vidas.

Autor

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio